![]() | Science and Technology in the Transformation of the World (UNU, 1982, 496 p.) |
![]() | ![]() | Session V: From intellectual dependence to creativity |
![]() | ![]() | La apropiación y la recuperación de las ciencias sociales en el contexto de los proyectos culturales endógenos |
![]() | ![]() | Guillermo Bonfil Batalla |
Ya es un lugar comigir, en cualquier proyecto de desarrollo, sea e convencional o alternativo, la realizacie investigaciones sociales. Todo mundo acepta que el conocimiento cientco de la realidad social cuyo desarrollo se busca promover, es un requisito ineludible que debe cumplirse por personal calificado y cuyos resultados aportaran - informaciones indispensables para guiar las diversas modelada des, etapas y aspectos del programa en cuestiLa idea de que la participacie las ciencias sociales es necesaria estan generalizada, que a veces se incluye un equipo de especialistas en estas disciplinas sin que se tenga claridad de cual es la funciue habrde desempeni cuales las - aportaciones que de ellos se deben esperar; se incorporan por que se presupone que debe haber cientcos sociales en todo equipo de este tipo.
La cuestie complica cuando lo que se discute no es ya si participan o no cientcos sociales, sino cual, dentro de las muchas corrientes y escuelas que conforman el universo de las ciencias sociales, resulta la madecuada para los objetivos que se persiguen. En efecto, la diversidad de tendencias teas y metodolas en el camp las ciencias sociales es un hecho palpable que, adem parece acentuarse en ciertas cas. Las ideolog polcas impltas o atribuidas a cada corriente de pensamiento identificable en las ciencias sociales, juega con frecuencia un papel determinante en la selecciinal; esto, u a la preponderancia de cierta corriente en las instituciones y los aparatos que auspician y llevan a cabo los proyectos, va conformando paula finamente la hegemonde cierto "modo de pensar" la ciencia social, con su correspondiente modo de hacerla.
En todo caso, la determinacie cuciencia social habre intervenir en la formulacie un proyecto de desarrollo, queda encuadrada exclusivamente en el marco de in teresas y convicciones de los sectores que toman la decisiNo entraremos aqu discutir cuales son los mecanismos que legitiman a una u otra corriente; participaran en ese proceso de legitimaciseguramente, las instituciones especializadas en producir y reproducir este camp conocimiento convencionalmente acotado; intervendrtambilos especialistas reconocidos que detentan el control de la sabidurigual mente reconocida; quienes no intervienen en ningso, son precisamente los sectores que serobjeto de estudio. Ellos son objeto, nunca sujeto, porque se asume que la ciencias social es un conocimiento que algunos adquieren para sistematizar e interpretar de manera cientca lo que otros son, gureo y pueden.
En efecto, ¿cuo se ha pensado que los indios de una tribu amaza o los campesinos mayas de Yucattengan algo que decir en relacion las ciencias sociales? Se supone, sque ellos deberaportar informacique ellos mismos son datos. Si acaso se admite que sus aspiraciones, sus "necesidades sentidas" deben ser conocidas por el investigador social y habrde tomarse en cuenta en la organizacie los planes de desarrollo. Pero no pasa por la mente la - idea de que puedan aportar algo a la "manera de pensar" la -ciencias social.
Veamos ahora otro aspecto del problema. Un rasgo comtodos los esfuerzos para encontrar alternativas socio culturales para el desarrollo, consiste en la afirmacie que todos los sectores involucrados en el proceso deben participar activamente en Esta participacie quiere consciente y profundamente motivada. No basta con la participaciasiva del informante que simplemente responde cuestiona r de entrevista; tampoco con la pura participacisalariada de los individuos que aportan su mano de obra para la ejecucie los proyectos. Se pretende lograr una participacireativa, que ponga en juego todas las capacidades individuales y sociales, tanto en la concepciomo en la ejecucie las actividades encaminadas al desarrollo. No se trata de que la gente aprenda por imitacisino de que desarrolle, saque de s! y acreciente el enorme caudal de sus potencialidades creativas. Es un proceso interno, endo, en el que se insertaran oportunamente y conforme resulten necesarios los conocimientos y las habilidades desarrollados por so ciudades tecnolamente mavanzadas.
Si esto es valido para la tecnology para la organizacie trabajo, ¿como Puede expresarse en el ito del conocimiento social? ¿Hay una Ciencia social recuperable en todo grupo que posee una cultura distintiva? Si hay tecnolog paralelas o alternativas ¿hay tambiciencias sociales paralelas y alternativas? ¿Se puede insertar en el tronco de las ciencias sociales "nativas" el conocimiento de las ciencias sociales reconocidas y legitimadas, o solo cabe, en este terreno, la traducciel conocimiento? Estamos en un campsbaloso en el que ciencia e ideologno se pueden separar flmente. Pero, a fin de cuentas, no es un problema esencialmente diferente del que se nos presenta cuando discutimos sobre tecnologagrla o pricas mcas.
De hecho la necesidad de rescatar el conocimiento social propio es mucho mas apremiante e indispensable que la de recuperar muchas otras arcas del conocimiento endo. No se conciben alternativas socioculturales al desarrollo que no impliquen el reconocimiento y la legitimidad de un modelo de sociedad propio y tal modelo solo puede formularse a partir de una concepciistematizada y organizada de lo que es la sociedad, de co» se transforma y porqude cuha sido su historia y cuales sus recursos para construir el futuro. Se trata, pues, de una sociologo si se prefiere, de una "etno sociolog.
Apuntemos ahora algunos aspectos relevantes para el problema de como rescatar y desarrollar esa sociologenda y como vincularla fructramente con las ciencias sociales reconocidas por la tradiciominante.